PÁGINAS AL VIENTO  -  Pinceladas de tinta           PANEL CENTRAL

En pocas palabras algo sobre conocimiento, cambio, crisis e ignorancia

Vicente Herrera Márquez

 

En el universo desde el momento que este se forma nada es estático, nada es fijo, nada igual en el  paso del tiempo de ayer a hoy o desde hace un minuto hasta ahora, ahora, ahora…ahora en este preciso momento...
Por ende en el planeta tierra que es nuestro refugio, nido y morada,
como así también en nuestra mente y cuerpo rigen las características  del sistema universal. Por lo tanto, como seres vivos que habitamos en este pequeño mundo también nos vemos afectados por las leyes universales  que como universo nos trasladan en los giros de la espiral del tiempo. Ese tiempo que se entrevera entre distancias y volúmenes, dimensión  incomprensible que es realmente el tirano que rige y controla la secuencia y consecuencia del devenir de este todo en el espacio.

En esta vorágine de espacio-tiempo nadie tiene la propiedad del saber o del no saber, ni siquiera el más sabio, para poder catalogar lo que es finito o infinito, lo que es falso o verdadero, lo que es ilusión o realidad, lo que es teoría o certeza; por lo tanto también podría considerarse válido creer o decir que todo e incluso nada, o la nada, es absoluto. aunque el raciocinio  determine que no lo es.
Sí, podemos decir y asegurar, a ciencia cierta y sin temor a equivocarnos, que somos dueños de la ignorancia.

En el universo, para bien o para mal, guste o no guste, todo evoluciona; todo cambia constantemente; todo es crisis permanente, incluso lo bueno  y lo malo. Dicho de otra forma, el bien y el mal también evolucionan y tienen distintas connotaciones según sean las reglas de la realidad que va cambiando en forma lenta o velozmente, según giren las manecillas del reloj controlador y según lo permitan los "intereses" del poder dominante.

Y por otro lado existe la gran disyuntiva de la vida de que todo lo que nos rodea desde el Big-Bang hasta la nebulosa más lejana, depende del color y la concavidad o convexidad del cristal con que se observe y además  según del punto de ubicación preferido o "conveniente" del observador, por lo tanto todo es una realidad conformista y acomodaticia,  pero a la vez caótica y ficticia.

Es dable pensar que en el universo lo finito temporal se puede transformar en infinito eterno, al pretender dimensionar la inmensidad, desde la pequeñez del conocimiento humano; y lo que sería aún peor, catalogar la realidad del ser y el entorno universal, desde la ignorancia manifiesta de quien escribe estas líneas tratando de demostrar pretenciosamente un poco de conocimiento  que ni siquiera le llega a la altura de los tobillos de los que hemos llegado a considerar sabios y que incluso hasta hoy apenas van trepando por las pantorrillas, o tal vez las rodillas, del conocimiento de  todos los estamentos y realidades posibles en la infinidad de confines esparcidos en el espacio y sostenidos por el tiempo, que forman este universo que estamos comenzando a conocer.



Incluido en el libro: Pinceladas de tinta, inquietudes, divagaciones y letras al margen.
©Derechos Reservados. Registrado con el N ° en el Registro de Propiedad Intelectual - Chile
 # Índice del libro #